Aunque ya se había adelantado en la última promoción de Masterchef Argentina (Telefe), igual había cierta expectativa: este lunes por la noche Wanda Nara y Mauro Icardi se reencontraron en la pantalla e interactuaron públicamente después de su penúltima reconciliación. El futbolista del Galatasaray turco entró a la cocina como “una sorpresa muy especial para los participantes y también para mí”, como definió la conductora.
Luego de saludar a Germán Martitegui, Damián Betular y Donato de Santis, encaró para donde estaba parada Wanda, quien le esquivó la boca y le ofreció su mejilla. “No le doy un beso en la boca porque lo dejo todo… ¡todo marcado!”, se justificó Nara con una risita nerviosa y señalándose los labios maquillados. “Ay, me muero que se ubica como un jurado…”, apuntó después cuando el delantero se paró entre Betular y Martitegui. “Es el jurado invitado”, le devolvieron.
“Para mi es un privilegio estar acá. Estuve tomando un par de tips acá de nuestro jurado…”, comenzó diciendo Icardi, pero Wanda lo frenó. “Perdoname que te interrumpa: sos muy modesto porque sos el experto de la familia en carnes…”, dijo como para tirarle flores a su marido. Con los mismos nervios con los que suele enfrentarse a una cámara, contó: “Sí, me gusta mucho el asado, hago mucho asado, mi papá también es muy buen cocinero, fue carnicero en su época y sabe de muchos cortes de carne y aprendí bastante”.
“Y yo también, Betular, por eso cocino tan bien ahora”, saltó Wanda. “Sí, sí me contó que en cuarentena cocinaban un montón y comían bastante carne”, dijo el pastelero. “Ahora la famlia volvió un poco a los congelados porque estoy trabajando mucho”, se defendió entre risas la hermana de Zaira. “Pero me gusta cocinar”. “Ella tiene una receta…”, buscó elogiarla el futbolista. “¿La torta? Es mítica”, dijo Betular.
Ahí, Wanda aprovechó para darles un consejo más doméstico y romántico que culinario a los participantes. “No importa cuántas recetas tengan, con que tengan una que sea infalible… Yo con la receta de manzanas enamoré a Mauro. Entonces, a veces no hace falta tener un recetario completo, yo me estudié de memoria una…”, dijo y fue ovacionada por todos en el estudio.
A continuación, se supo que la competencia de la jornada sería en dos partes y con dos desafíos distintos. El primero consistía en asar una entraña en 15 minutos, siendo Icardi sería uno de los jurados. “Su especialidad es la entraña y él mismo selecciono los ingredientes que tienen ahí. Tienen que hacer la mejor entraña de sus vidas y el que va a decir cuál es la mejor, va a ser Mauro. Él les va a contar sus secretos para preparar la mejor en esta mini prueba”, anunciaron los jurados. ¿El beneficio? Pasar directamente al balcón y no competir en la segunda prueba.
“Les elegí una entraña con todos los ingredientes para hacer un chimichurri, pero en mi casa hay una particularidad, que es la nuez moscada”, contó el futbolista. “A mí me gusta embadurnar bien la entraña en este chimichurri y mandarla al fuego”, agregó a modo de secreto. “¿Será difícil hacer una entraña? Yo pensé que era vuelta y vuelta”, preguntó Wanda. “Depende de cada cocinero… Cuando las pruebe, les voy a decir quién es la mejor”, respondió Icardi con la frialdad y seguridad de un delantero implacable. “¡Estamos creando un monstruo! Yo tengo un miedo…”, bromeó la conductora ante el tono de su marido.
Mientras recorría las estaciones Icardi contó que le gusta la entraña con “la piel crocante”, que el principal error al asar este corte “dejar la grasa cruda, esa película que cubre la entraña. Si la dejás cruda, queda muy chiclosa”. Que cada quién puede elegir su punto, pero que él la prefiere “un poco menos que medio, que queda con un gusto fuerte”. Que antes de aplicar el chimichurri sobre la carne, “yo lo probaría, ver que no sea muy invadente”). Al pasar los 15 minutos y tras haber probado las ocho entrañas, Mauro eligió a la de la participante Silvana.
Ahí terminó la participación de Icardi en el programa y su mujer lo despidió. “Muchas gracias Mauro por estar acá, por acompañarnos… Sé que lo hacés por mi y que me acompañes me pone muy contenta. Gracias por estar acá…”, le dijo. “Gracias a todos, gracias a los participantes, al jurado, gracias por esta oportunidad… ¡A vos!”, le contestó a Wanda mirándola a los ojos. Y después de desearles lo mejor a los participantes y saludar uno por uno a los jurados, volvió hacia donde estaba Nara y esta vez sí, se besaron en la boca por algunos segundos, mientras en el estudio se derretían ante la reconciliación televisada.
El gesto romántico conmovió a Wanda hasta las lágrimas y mientras se limpiaba el rostro, les pedía a los jurados que “no me hagan más esto, la próxima inviten a sus parejas”, dando a entender cierto toque de sorpresa en la visita. “¡Me emocioné!”, le dijo Donato a la vez en que también se secaba las mejillas.
